Capacis vuelve al ruedo tras las vacaciones de Navidad. Algunos muy contentos de volver a vernos, otros, acostumbrados a levantarse al mediodía durante estas fechas, entraban por la puerta de Capacis con un ojo cerrado y con pocas ganas de hablar.
Mientras la gente iba llegando las 2 frases más repetidas fueron: ¡Feliz año, fulanito! Y no te acerques que te lo pego. Creo que ganó la segunda.
Los menos valientes o los más responsables, según como lo mires, se quedaron en casa pasando el resfriado hasta que la inmunidad de rebaño haga efecto.
¡Pero Capacis tiene que seguir cambiando vidas! Por lo que nos ponemos en marcha contra viento, marea o cualquier barrera que se interponga en nuestro camino, ya que, como dijo un gran sabio: “un gran poder, conlleva una gran responsabilidad”.
Esta célebre frase se le atribuye a William Lamb, un parlamentario británico del siglo XIX, pero si os digo la verdad, yo se la escuché al tío Ben en una peli de Spiderman.
Las clases comenzaron con algunos huecos vacíos debido, también, a que muchos alumnos se encuentran en las empresas convirtiéndose en grandes profesionales, fruto del increíble trabajo de los chavales, la formación de calidad que impartimos, nuestro departamento de empleo y Capacis en todo su conjunto.
Pensaréis que son demasiados elogios, pero este blog trata los temas rigurosamente y debemos hablar con propiedad para no perder credibilidad.
¿Por dónde iba? Ah, sí. Qué, a pesar de algunas ausencias, las clases volvieron a su curso habitual, mientras que el descanso de las 12:00 fue diferente a los anteriores a las vacaciones, ya que casi todos nos quedamos en la funda, supongo que, por el frío, la lluvia y porque aquellos que llegaron dormidos, despertaron y tenían ganas de preguntar a los compañeros por sus vacaciones.
Y así, entre risas y anécdotas navideñas, poco a poco, aunque cueste arrancar, todo va volviendo a la normalidad.
Nos ponemos en marcha para planificar y ejecutar al dedillo los planes para este 2025, porque, si te despistas un segundo, te presentas en verano sin haberte dado cuenta. Pero eso no pasará en Capacis, ya que, tan pronto como aterrizamos, encontramos un mensaje de Fátima en la bandeja de entrada de nuestros correos corporativos con el asunto: ¡REUNIÓN DE EQUIPO! (las mayúsculas y las exclamaciones son cosa mía, pero así lo leímos más de uno) Una maravillosa congregación en la que se reúne el “Equipo C” para comunicar, debatir y decidir sobre los temas más importantes de cada departamento y que suele durar entre 4 horas y eternamente.
Supongo que este ritmo es necesario para recopilar logros y alcanzar nuevos objetivos, pero, sobre todo, porque el cometido de Capacis lo requiere, ya que un gran poder, conlleva una gran responsabilidad.